Si nunca probaste el ajo negro, te invitamos a que lo hagas. ¡Te sorprenderá su aroma, textura y sabor! Ya sea untado en pan o crudo, al consumirlo estarás disfrutando de una auténtica “delicatessen”.
Su proceso de fabricación:
Para llegar a obtener el ajo negro, un producto cada vez más conocido, se tiene que realizar un proceso de transformación, donde el ajo morado se convierte en ajo negro mediante un proceso de fermentación y maduración. Durante ese proceso, el ajo va adquiriendo su color negro característico y su textura más sólida y consistente. Al llegar al final del proceso de fermentación y maduración, el ajo habrá multiplicado las propiedades y nutrientes del ajo original (el ajo morado). Esta es una de las razones por las que el ajo negro está siendo cada vez más demandado en nuestra gastronomía.
Al obtener el ajo negro, logramos eliminar algunos efectos secundarios que se observan en algunas personas al consumir ajo morado. Por ejemplo, se reducen los problemas estomacales (sensación de ardor al consumir el ajo). También se reduce la sensación de mal aliento que a veces se produce al ingerir el ajo en estado natural.
El ajo negro tiene un sabor más suave, con una textura cremosa y consistente. Su aroma es agradable, con toques aromáticos que nos recuerdan al caramelo o al regaliz. Eso lo convierte en un alimento que cada vez se utiliza más en la gastronomía española y mediterránea.
Beneficios y propiedades del ajo negro:
La principal propiedad que observamos en el ajo negro es su elevada capacidad antioxidante. Se calcula que el ajo negro es capaz de multiplicar por 10 los niveles de agentes antioxidantes encontrados en el ajo morado. En el ajo negro se detecta la presencia de compuestos fenólicos y flavonoides que son importantes agentes antioxidantes que preservan la salud de nuestras células. Eso nos ayuda a fortalecer nuestro organismo y además, nos sirve para potenciar las defensas de nuestro sistema inmunológico
El ajo negro también es capaz de controlar los niveles de presión sanguínea, favoreciendo la reducción de la presión arterial. También actúa como antibiótico natural (igual que los otros tipos de ajos). Es de sobra conocido que el consumo de ajo reduce las infecciones y fortalece las defensas del organismo.
Este tipo de ajo se considera también como una fuente natural de energía. Otro potencial atribuido al ajo negro es su capacidad anticancerígena debido a sus elevados índices de polifenoles, una sustancia que actúa frente a las células que provocan algunos tipos de cánceres.
Y para terminar, queremos mencionar la presencia de alicina, que es una sustancia que le permite a nuestro organismo regular los niveles de azúcar en la sangre. Por tanto, las personas que padecen diabetes deben considerar el ajo negro como un potente aliado en la lucha contra esa enfermedad.
¿Sabías qué…?
El ajo negro se originó en Japón, aunque existe mucha controversia relacionada con su origen. Su uso está cada vez más extendido por todo el mundo. En España, empresas como Amefruits son una referencia nacional en este sector.
Las mejores recetas que puedes preparar con ajo negro:
La forma más común de consumir el ajo negro es ingerirlo directamente o usarlo para untar en pan o en algún tipo de tostada. Pero también existen algunas recetas en las que podemos utilizar este producto. Por ejemplo, en varias recetas de pollo y espaguetis se suele usar este tipo de ajos para potenciar su sabor. Últimamente se está haciendo cada vez más común la fabricación del alioli de ajo negro. También encontrar este productos en algunos tipos de pizzas y hamburguesas.
Como podemos observar, todo depende de la imaginación y el interés por inventar nuevos platos que cada uno de nosotros llevamos dentro. Lo que sí está asegurado es el sabor espectacular que nos aporta este tipo de ajo. Pide ahora mismo tus ajos negros a granel y aprovecha la promoción que tenemos para este producto. ¡El éxito en tus recetas está garantizado!